Querídisimas domusinas, compañeras de EGB, han pasado cuatro décadas desde la última vez que nos vimos y dentro de menos de dos semanas vamos a reencontrarnos en Valencia.
Estoy segura que tenéis la misma ilusión que nosotras en volver a vernos, creo que este post nos va a poder facilitar el encuentro, ya que las preguntas son muchas ;).

Dejamos España y llegamos a Israel

Como sabréis, Gaby y yo estudiamos en Domus Godella hasta los quince años (desde primero de EGB hasta 1ro de BUP). En el verano 1976, tuvimos la desgracia de perder a nuestro padre, que falleció repentinamente de una trombosis cerebral durante las vacaciones de verano entre sexto y séptimo. Tres años después, en Agosto de 1979 viajamos junto a nuestra madre a nuestra tierra natal, Israel.

Todas vosotras, dulces compañeras domusinas sabíais que nosotras, las gemelas, eramos dos niñas judías de Israel, en esos años (aún de Franco), no habían casi miembros de la comunidad israelita en Valencia, y nosotras, las gemelas, constituíamos por aquél entonces un fenómeno bastante peculiar entre todas vosotras.

Os preguntareis también cómo es que nuestros apellidos cambiaron, pues os comento que el apellido que teníamos en su tiempo era de raíces rumanas-germanas, dado que nuestro Papá tenía raíces maternas en Bulgaria y paternas en Rumanía, de donde provenía nuestro inicial apellido Schwartz, al que respondíamos por aquél entonces. Cuando llegamos a Israel, adoptamos el apellido familiar localizado, que tenían ya nuestros dos hermanos mayores y tíos paternos: Kedar. Una vez casadas, añadimos respectivamente los nombres de nuestros esposos, el mío: Kelman, por lo que hoy me llamo Daphna Kedar Kelman.

Una vez llegadas a Israel, logramos ingresar directamente a segundo de BUP en Tel-Aviv sin repetir curso, ese milagro fue posible gracias al alto nivel de matemáticas y asignaturas de ciencias que estudiamos en Domus. Para mi fue un sacrificio por aquél entonces el no poder elegir una asignatura de lenguas, pero, tal como menciono, fue una gran suerte el venir tan estupendamente preparadas en cuestión de nivel y material de estudios, hecho que agradezco inmensamente a las profesoras de la Fundación Domus (Valencia).

•